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jueves, 10 de mayo de 2012

EL CUENTO UN PUENTE QUE CONDUCE A LA IMAGINACIÓN

Amor de colegio
A una niña que cursaba el grado séptimo  le llamaba la atención un muchacho, antes eran muy buenos amigos, pero un día ocurrió un incidente,  razón por la cual  pelearon y no se volvieron a hablar, ella no podía expresar lo que sentía por el joven. Cuando pasaron al grado octavo, restablecieron su amistad pero la niña ya tenía su novio, sin embargo le gustaba mucho Sebastián, el joven del grado séptimo. Entonces, Michelle como se conoce a la niña, tuvo una discusión sin fundamento con el novio, finalizando su relación sentimental con Andrés. Él no entendió ¿por qué? si estaban en su mejor momento, surgieron  rumores que ella le término porque no sentía nada por él. Lo que lo llevó a interrogarle: -- ¿por qué terminó nuestra relación, si estábamos bien?, ella evadió la pregunta, pero su rostro se enrojeció seguramente sintiendo culpabilidad, ya que  le interesaba otra persona, luego respondió: Es que nunca había tenido una relación tan larga. Fue una evasiva sin fundamento.
Cuando vivía con la tía se había enamorado de Santiago, tuvieron una relación sin mucho compromiso, hasta que sus padres volvieron a llevarla a su seno familiar, por su puesto ella acepto partir al lado de sus padres y Santiago se puso muy triste porque a pesar de que la relación no era trascendental, estaba enamorado en secreto de Michelle, pues al comienzo, todo lo mantenían en secreto para evitar que los amigos les molestaran, pues, estaban en la pre adolescencia y este tipo de situaciones daba mucha picardía por la curiosidad y el tabú que persiste en los hogares, hasta que un día los amigos vieron  a Michelle y Santiago dándose un beso, los amigos empezaron a molestarlos, pero a ellos le dio igual y sintieron menos presión porque ya no tendrían que esconder mas.
 Michelle en las tardes permanecía con sus amigas y Santiago con los suyos, en las tardes no se veían, hasta en la noche porque ya no estaban con su amigos y amigas, él la invitaba a comer, se iban a caminar, a hablar sobre su pronta separación porque se iría para donde sus padres, inicialmente, todo abarcaba en el viaje de Michelle, pues, estaba planeado y decidido, hasta que una noche, Santiago le dijo: Mis padres también piden que me vaya a vivir con ellos, y continuo: Quiero mucho a mis padres pero me he soportado esta soledad y he vivido con mi abuelo y mi hermana por estar cerca de ti, pero si tu te vas, ya no hay nada que me detenga, no seria feliz viendo pasar el tiempo y las calles vacías porque sin tu presencia todo esta vacío, nada tendrá sentido, … seré un triste joven que ya no querrá salir con sus amigos ni siquiera asistir a clases porque mi soledad no me dejaría concentrar ni mucho menos aprender… los dos lloraron, se querían mucho, prometieron que se llamarían todas la noches para saber como estaba cada uno y que se seguirían hablando por el chat. Y fue  así,  se hablaban por el chat o a veces la llamaba para saber como estaba. Pero al pasar el tiempo todas las promesas quedaron olvidadas pues aunque el amor es hermoso,  suele ser muy frágil y el amor de colegio es como un manantial de agua que cada vez es mas escasa y no volvieron a comunicarse porque ya tenían nuevas parejas y nuevos amigos, todo cambió, eran dos personas en diferentes contextos, cada uno conoció diferentes personas  en especial amigos; resaltando que los amigos perduran en el pasar del tiempo por eso es necesario conocer y hacer mundo, Michelle, supera esta etapa, después de un lapso de tristeza y melancolía vuelve a creer en el amor porque la flecha que cupido lanzó atravesó entre Michelle y Sebastián, el chico del grado séptimo, pero como siempre la vida le pone otro obstáculo, por circunstancias inexplicables que determina el destino, ellos no se hablaban se tenían mucho rencor, Sebastián indiferente por miedo a aceptar sus sentimientos y Michelle por no doblegar manifestaba con orgullo su felicidad vacía, ambos continuaron en este plan hasta que los amigos como siempre intermediaron para que se acercaran y volvieron a tener contacto verbal, ya era un trampolín vencido, ahora era restablecer esa bonita amistad que por distracción de cupido pudo generar malos entendidos, así lo tomo Michelle, sólo quería recuperar ese amigo que la hacia reír, pero sucedió que los dos estaban con miedo de enfrentar la realidad, los dos sabían que entre ellos había química, los amigos sabían sus sentimientos, lo duro era expresarlo poder expresárselo aunque tal ves, algún día podría pasar tal acontecimiento y superarían tantas penas por miedo a aceptar esa llama de amor que tanto necesitaba de oxigeno para mantenerse, pero ¿Por qué tanto sufrimiento? Si era algo tan normal que la naturaleza misma se encarga de generar este tipo de situaciones, es cuestión de comprender que somos humanos, sentimos y deseamos estar acompañados para ejecutar cualquier actividad o proyecto, entre dos es más fácil, porque se disipan penas y desesperanzas.
Pasaba el tiempo y poco a poco fue mejorando su relación, era difícil que volvieron a ser los parceros que fueron al comienzo, los que se ayudaban y tapaban tareas no resueltas a pesar de que los profesores eran estrictos siempre encontraban la manera de ejercer sus habilidades para ayudar el uno al otro. Mejoró la situación, finalizaba otro año escolar, llegarían las vacaciones y cada uno tendría que ocupar de sus actividades recesivas y olvidar de la escolaridad, quizá el principal objetivo era estar en contacto y así lo hicieron, los medios de comunicación que tanto inculcaba la docente de informática, les sirvió de mucho para que estuvieran en contacto, los email, los celulares y en especial los chat’s hacen que se mantengan comunicados, el amor cibernético es algo fenomenal, porque están separados de cuerpo pero saben cada detalle de su actividad diaria, Michelle y Sebastián son unos afortunados existentes del siglo XXI, en donde la tecnología y la globalización hacen parte de la vida actual. No solo en los negocios internacionales ni intereses escolares funciona esta herramienta, también es parte vital de un par de jóvenes enamorados que buscan estar cerca a pesar de la distancia.
Un nuevo año comienza, ya cursan noveno, es algo desconocido como todos los años, siempre pasa algo nuevo a pesar de que todo parezca rutinario, los mismos docentes, cuando mejor hemos aprendido la gramática en Español y Literatura. El amor entre Michelle y Sebastián es el vivo reflejo de los amores de escuela en todo el mundo, el primer amor vivirá en el corazón de todo ser humano perdurando para siempre como el conocimiento que se adquiere cuando estábamos en el bachillerato.
AUTORA
ANGIE PAOLA TORRES DE LA ESPRIELLA
GRADO OCTAVO

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